Apuntes de nivología. |
I. La nieve. Sus propiedades físicas
* FORMACIÓN:
El vapor de agua de la atmósfera se condensa en cristales
de hielo cuando se enfría lo suficiente. Si el aire se satura de humedad,
el vapor sobrante se condensa en torno a ciertas partículas atmosféricas.
El agua pura en la atmósfera no se congela hasta alcanzar –40 ºC
pero gracias a esas partículas, llamados núcleos de congelación,
lo hacen en torno a –12 º, formándose unos pequeños
cristales de hielo que al absorber humedad forman los copos. A temperaturas
entre 0º y-12º, el agua está en forma líquida en estado
de subfusión, y por eso, a pocos grados bajo cero, es posible que llueva.
Si la temperatura se mantiene por debajo de -12º se forman
agujas, estrellas y dendritas. Entre -10º y -12º, plaquetas; entre
-6º y -10º , columnas; entre -6º y -2º, partículas
irregulares y nieve granulada. Y si está en torno a los 0º, se forman
copos grandes y húmedos.
El viento rompe los cristales en partículas muy finas, formando capas
compactas en el suelo.
* CLASIFICACIÓN
1. Plaquetas: De formas planas y normalmente
hexagonales.
2. Estrellas: Formas estrelladas con seis ramas.
3. Columnas: Barritas cilíndricas o trapezoidales.
4. Agujas: Formas de aguja que pueden cruzarse.
5. Dendritas: Estrellas tridimensionales, no planas.
6. Columnas entre plaquetas: Unión entre ambas formas.
7. Partículas irregulares: Cristales sin una forma concreta.
8. Nieve granulada: Granizo menudo y blando.
9. Gránulos de hielo: Granizo menudo y compacto.
10. Granizo: Bolas de hielo duro.
Además :
• Escarcha: Cristales de hielo originados
por enfriamiento del aire superficial en noches despejadas. Forma capas muy
inestables.
• Cencellada: Depósito de hielo en los objetos cuando son rodeados
por nieblas frías.
II. PROPIEDADES FÍSICAS
DE LA NIEVE
La nieve contiene vapor de agua y a veces agua líquida
en diferentes cantidades y temperaturas, proporcionándole unas determinadas
propiedades mecánicas y térmicas:
Resistencia a la compresión:
Tras la nevada se produce un apelmazamiento mecánico (del 15 al 20%)
y otro térmico si se acerca a 0º, que proporciona cohesión
y estabilidad.
Variación de la densidad: Al apelmazarse
y transformarse, aumenta su densidad desde 50 kg/m3 de la nieve reciente,
a 500 de la trasformada, o 900 del hielo de glaciar.
Viscosidad y plasticidad: La nieve es deformable
y tiende a fluir pendiente abajo. Su viscosidad aumenta con el frío
y el aumento de densidad, haciendo fluir más rápidamente las
capas superiores.
Cohesión: Existe una cohesión
frágil entre las ramas de los cristales de nieve, que desaparece cuando
se trasforman. Si la temperatura se aproxima a 0º se forma una película
fina de agua entre los granos, que producen una cohesión precaria,
pero si se rehiela se produce una cohesión muy sólida.
Rozamiento: Según sus cristales,
temperatura y humedad, la nieve permanece en equilibrio en pendientes de ángulos
diferentes.
Temperatura de la nieve:
Influye en sus propiedades mecánicas. Varía por:
Radiación solar absorbida
(por los 15 cm superficiales): La nieve reciente absorbe el 10%, frente al
50% de la nieve vieja.
Radiación infrarroja reflejada:
Produce enfriamiento de la superficie (hasta 10º ó 15º inferior
a la temperatura ambiente) en noches despejadas.
Temperatura del aire:
Influye en las capas superficiales.
Viento: Acelera
la transferencia de calor entre el aire y la nieve.
Humedad del aire:
Si es cálido y húmedo (niebla), el vapor depositado en la nieve
libera calor a ésta. Si es frío y seco, la nieve bombea vapor
a la superficie, evaporándose y enfriando ésta.
Lluvia: Provoca
derretimiento rápido si empapa el manto.
Flujo geotérmico:
Calienta la nieve junto al suelo, permaneciendo
III. EL MANTO NIVOSO
Los cristales de nieve caídos, sufren distintas trasformaciones
debidas al viento, nubosidad, precipitaciones, temperatura, humedad, etc. A
lo largo de sucesivas nevadas se forman diferentes capas que componen el manto
nivoso. Según sea esta metamorfosis, la nieve recién caída
va evolucionando a distintos tipos de granos:
1. Nieve fresca (+): Cristales
de nieve reciente, sin metamorfosis. Su cohesión es elevada.
2. Escarcha (V): Cristales desde varios
mm hasta 10 cm, originados por enfriamiento en noches despejadas. Forman capas
especialmente inestables al quedar enterradas.
3. Nieve granulada (?): Es nieve granulada
de hasta 5 mm, sin metamorfosis. Su cohesión es escasa.
4. Partículas reconocibles (?): Son
fragmentos de cristales de entre 0,5 y 1 mm, con atenuación de crestas
y ángulos, formados por deformación térmica o mecánica.
Ofrecen poca cohesión.
5. Placas de viento (?): Son granos finos
de unos 0,2 mm, formados por el viento al romper los cristales originales.
Forman capas compactas e inestables al no soldarse al estrato inferior.
6. Granos finos (•): Cristales pequeños
de entre 0,2 y 0,5 mm, redondeados y uniformes. Producidos en un manto nivoso
con temperatura homogénea a partir de + ? ?. Ofrecen estabilidad.
7. Granos redondos (0): Cristales redondos
y aislados de entre 0,5 y 3 mm. Producidos al aumentar la temperatura del
manto hasta el punto de fusión. Con poca cohesión, forman capas
inestables.
8. Granos de caras planas (?): Pequeños
granos de entre 0,3 y 0,5 mm, con algunas facetas lisas o estriadas. Producidos
en un manto nivoso con pequeña diferencia de temperatura entre capas
a partir de •?. Ofrecen baja cohesión y capas inestables.
9. Cubiletes (?): Cristales gruesos de entre
0,5 y 5 mm, con facetas estriadas o escalonadas, y aristas. Producidos por
diferencias de temperatura grande entre las capas del manto a partir de ?.
Tienen muy poca cohesión y forman capas muy inestables.
10. Costras de rehielo (o):: Superficies
uniformes de nieve fundida y rehelada. De gran cohesión, aunque pueden
servir de plano de deslizamiento a capas superiores.
IV. METAMORFOSIS DEL MANTO NIVOSO
El manto nivoso se trasforma principalmente por factores
térmicos. Si está compuesto de nieve seca y la superficie del
manto está mucho más fría (-15º) que la base (0º),
sufre metamorfosis de gradiente, produciéndose ciertos cristales. Pero
si la diferencia es casi nula, sufre metamorfosis de isotermia, dando lugar
a otro tipo de cristales. Si el manto es de nieve húmeda, sufre metamorfosis
de fusión, produciéndose cristales diferentes.
Tipos de Metamorfosis:
- Metamorfosis destructiva:
Reduce a pequeños fragmentos los cristales iniciales debido al viento
y al rodamiento de los mismos. Produce cristales cohesionados y capas compactas,
pero a veces no se fijan a la capa subyacente y son inestables (placas de
viento a sotavento).
++ ? +? ? ?? ? ?• ? ••
- Metamorfosis de gradiente térmico
o constructiva: La temperatura en superficie del manto nivoso es fría
y va aumentando según profundizamos hasta alcanzar los 0ºC en
su base debido al flujo geotérmico. Esto produce una ascendencia muy
lenta de aire cálido y parte del vapor de agua que lleva se congela
en torno a los cristales formando facetas y escalones, produciendo granos
de caras planas y cubiletes que inestabilizan el manto en las capas más
bajas (común en caras norte).
+++ ? +?? ? ?•? ? ??? ? ???
- Metamorfosis de isotermia:
Se produce cuando en el manto nivoso hay débil gradiente de temperatura
entre capas, o incluso isotermia. Aún así, se rompen las ramificaciones
de los cristales produciendo granos finos más o menos redondeados,
que van amentando en tamaño. Estos granos se van aglutinando y uniendo,
y el manto gana en estabilidad.
++ ? +? ? ?? ? ?• ? ••
- Metamorfosis de fusión:
El agua líquida de lluvia o derretimiento, modifica los cristales y
los redondea formando granos finos con una película líquida
alrededor. Al helarse por las noches provocan una gran cohesión entre
ellos y estabilidad. Pero con el calor del día, esta cohesión
desaparece y se inestabiliza la capa. Si el agua escurre a las capas bajas
sin helarse, puede inestabilizar todo el manto y provocar aludes de fondo
(frecuente en primavera y caras sur).
++++ ? ?•?? ? 0000
V. ALUDES. TIPOS
El manto nivoso permanece en equilibrio si sus fuerzas de tracción
(peso del manto nivoso y el ángulo de la pendiente) son compensadas por
las de resistencia (anclajes al suelo, cohesión de la nieve y rozamiento
de los granos). Este equilibrio se puede romper por sobrecarga del manto (paso
de animal o persona, caída de más nieve o lluvia y caída
de cornisas o seracs) o disminución de la resistencia (metamorfosis del
manto nivoso).
Cuando esto ocurre, se produce un Alud. Podemos distinguirlos según su
zona de origen (puntual o lineal), su profundidad (de superficie o de fondo),
su constitución (de nieve polvo, seca o húmeda), su trayectoria
(de ladera o de corredor) y su zona de detención. Tipos:
• Alud de nieve reciente:
Deslizamiento de masas de nieve reciente (+??) sin cohesión, pudiendo
ser pequeñas coladas o enormes masas devastadoras. Tienen un arranque
puntual y su deposito es una masa amplia y homogénea (nieve seca),
o una acumulación de bolas (nieve húmeda).
Se producen al acumularse espesores de nieve importantes en pendientes propicias.
Espesores de entre 30 y 60 cm son inestables en pendientes fuertes (más
de 50º); entre 60 y 90 cm en pendientes medias (de 30º a 50º);
más de 90 cm en pendientes ligeras (menos de 30º). Cuanto más
intensa sea la nevada (más acumulación en menos tiempo),mayor
es el riesgo al no permitir apelmazamiento mecánico.
Si la temperatura se mantiene por debajo de -5º, persistirá el
riesgo, pero si se aproxima a 0º, se apelmazará y estabilizará.
Un caso particular es el Alud de nieve polvo, en el que la nieve se mezcla
con el aire produciendo una nube asfixiante de gran velocidad (hasta 100 km/h)
y poder destructivo
• Alud de placas: Deslizamiento de
capas de nieve compacta (?•) y densa, pero que no se cohesionan con
el sustrato inferior por presentar éste un plano de deslizamiento (nieve
granulada, granos de caras planas, cubiletes o escarcha). El arranque es lineal
y trasversal a la pendiente, y el depósito está formado por
bloques irregulares.
Suelen iniciarse por sobrecargas por nevadas, caída de cornisas, o
paso de personas o animales, y principalmente en pendientes de entre 25º
y 45º.
Un caso particular es el Alud de placa de viento (?), formados a sotavento
de aristas o crestas. El viento rompe los cristales en partículas finas
que se cohesionan bien entre ellas formando placas rígidas, pero que
no se anclan al sustrato inferior por no haber apelmazamiento
• Alud de fusión: Deslizamiento
de nieve húmeda (0) sin cohesión, en pequeñas coladas
o transportando grandes masas de nieve. Generalmente su salida es puntual,
circulando por las vaguadas entre los 20 y 50 km/h. El depósito forma
un cono de bloques densos y materiales arrastrados.
Suelen ocurrir en la primavera, cuando un aumento de temperatura funde los
puentes de hielo que estabilizaban el manto (metamorfosis de fusión)
y aumenta su contenido de agua líquida.
• Alud por caídas
de cornisas o seracs: Debidos a sobrecargas o aumentos
de temperatura que hacen deslizar grandes bloques.
VI. ESCALA EUROPEA DE RIESGO DE ALUDES
Indice de
riesgo |
Estabilidad
del manto nivoso |
Probabilidad
de desencadenamiento |
Recomendaciones |
1
Débil |
En la mayoría de vertientes el manto nivoso bien estabilizado |
Excepcionalmente sólo puede desencadenar aludes en algunas pendientes
muy propicias y sobre todo a causa de fuertes sobrecargas. De forma natural
sólo pueden desencadenarse coladas o pequeños aludes. |
Las excursiones y el descenso con esquís son posibles casi sin
restricciones. |
2
Limitado |
El algunas pendientes suficientemente propicias, el manto sólo
está parcialmente estabilizado. |
Se pueden desencadenar aludes sobre todo por sobrecargas fuertes y en
algunas pendientes cuyas características se describen normalmente
en el boletín. No se esperan salidas espontáneas de aludes
de gran amplitud. |
Las excursiones deben realizarse con previa planificación. Se recomienda
prudencia a la hora de elegir los itinerarios, evitando en lo posible las
vertientes inclinadas con la orientación y la altitud que se indican. |
3
Notable |
En numerosas pendientes suficientemente propicias, el manto está
moderada o debilmente estabilizado. |
Se pueden desencadenar aludes incluso por sobrecargas débiles y
en numerosas pendientes cuyas características se describen h abitualmente
en el boletín. En ciertas situaciones son posibles algunas salidas
espontáneas de aludes de dimensiones medias y a veces grandes. |
Deben evitarse las vertientes inclinadas en las orientaciones y altitudes
que se indican. Se requiere mucha experiencia y una gran capacidad de apreciación
del peligro de aludes. |
4
Fuerte |
En la mayoría de pendientes suficientemente propicias a los aludes,
el manto está débilmente estabilizado. |
Se pueden desencadenar aludes incluso por sobrecargas débiles
en la mayoría de las pendientes suficientemente propicias a los
mismos. En ciertas situaciones, son posibles numerosas salidas espontáneas
de aludes de dimensiones medias y a veces grandes. |
Las excursiones tienen que limitarse a las zonas con pendiente moderada.
Es posible que la parte baja de las pendientes esté igualmente expuesta
al peligro de aludes. |
5 Muy Fuerte |
Inestabilidad generalizada del manto nivoso. |
Se esperan numerosos y grandes aludes originados espontáneamente
incluyendo zonas oendientes poco propicias. |
Se tiene que renunciar a hacer excursiones. |
VII. TESTS DE EVALUACIÓN DE ESTABILIDAD DEL
MANTO NIVOSO
Existen métodos rápidos para evaluar la estabilidad
del manto durante nuestras excursiones. Elegimos una zona representativa del
terreno por donde queremos circular, pero segura, y realizamos alguno de los
siguientes tests:
- Test del bastón:
Consiste en ir clavando el bastón o una sonda de nieve para sentir
la resistencia de las diferentes capas. Si en profundidad encontramos capas
más blandas, pueden estar formadas por cristales poco cohesionados,
y deberíamos cavar y examinarlos.
- Test noruego: Con la pala
recortamos un bloque trapezoidal de 40x50x80 cm. Por el lado de debajo de
80 despejamos la nieve para que el bloque pueda deslizar. Con la pala empujamos
el bloque por el lado de arriba para desprenderlo. La fuerza que tengamos
que emplear, nos indicará la estabilidad: hasta 10kg riesgo alto; de
10 a 20 kg riesgo medio; más de 20 kg riesgo escaso.
- Test del salto: Con la
pala aislamos un bloque rectangular de 180x150. Por el lado de debajo de 180
despejamos la nieve para que el bloque pueda deslizar. Un esquiador se sube
al bloque primero con un esquí, después con los dos y más
tarde saltando repetidamente, hasta que éste se desprenda. Cuanto antes
se deslice el bloque, más inestable será el manto.
VIII. SONDEO POR GOLPEO.
Es el método empleado por los Servicios de Evaluación
de Riesgo de Aludes. Consiste en:
• Elección del lugar:
Un equipo de dos personas elige un lugar representativo y seguro, introduciendo
una sonda especial (tres tubos de un metro, varilla de golpeo y peso) hasta
el suelo, intuyendo las capas blandas o deslizantes, y midiendo el espesor
total del manto nivoso.
• Sondeo por golpeo: Vamos introduciendo
la sonda (de 1kg) en la nieve gracias al golpeo sobre ella, de un peso (1
kg) desde 10 cm de alto, procurando un hundimiento regular de 1cm por golpe.
Anotamos los cm penetrados a cada golpe o serie de golpes. Si encontramos
un estrato duro, golpearemos desde más alto (20, 30,…cm), y si
fuera blando, desde más abajo (20,10 cm). Todos los datos de hundimiento,
peso usado, altura, número de golpes y número de tubos de sonda
empleados, quedan anotados en el impreso de “sondeo”.
• Perfil estratigráfico:
Vamos excavando una zanja en la nieve y anotamos en el impreso de “perfil”,
los siguientes parámetros de la pared en sombra de cada estrato: temperatura
del aire a 1,5 m de alto, temperatura de la superficie nivosa, temperatura
del estrato, espesor en cm, dureza del 1 al 5(puño, dedos, dedo, lápiz,
navaja), humedad del 1 al 5(no hace bolas, guante seco, húmedo, mojado,
escurre agua), densidad (pesando una muestra), forma y dimensiones de los
cristales (placa muestra).
IX. PERFIL DE NIEVE.
Con los datos recopilados en el sondeo por golpeo y del
perfil estratigráfico, se elabora un gráfico, que nos proporciona
información para evaluar el riesgo de aludes y sus características:
• Con los datos del sondeo calculamos la Resistencia
de cada estrato ( 2kg son el peso de un esquiador de 65Kg, aprox; 20 kg, el
de una persona andando, aprox). Después, empezando por el estrato de
fondo, dibujamos en el perfil de nieve, rectángulos de altura su espesor
y anchura su resistencia.
• Con los datos del perfil estratigráfico, dibujamos en el perfil
de nieve una línea representando las temperaturas. Después delimitamos
los distintos estratos y apuntamos sus parámetros de forma, tamaño,
dureza, humedad y densidad.
Interpretación del perfil de nieve:
• Estudiamos la distribución de estratos,
espesor y tipo de cristal.
• La resistencia aumentando hacia el fondo, nos indicará estabilidad.
• La dureza de cada estrato nos proporciona una idea de su cohesión.
• La humedad y temperatura nos dará idea de que tipo de metamorfosis
puede estar ocurriendo.
Con estos datos haremos una valoración del riesgo
actual de aludes, y de su posible evolución en función del tiempo
previsto.
X. SEGURIDAD EN MONTAÑA: PREVENCIÓN.
• Estudio del
itinerario: Recopilar información de mapas,
guías y refugios, para conocer el estado de la nieve y las zonas peligrosas.
Prestaremos atención a las laderas propicias de formar cornisas que se
puedan derrumbar, o placas de viento inestables al paso de las personas, o placas
de hielo por el rehielo nocturno. Cuidado con las vaguadas que canalizan los
aludes.
• Previsiones nivológicas y meteorológicas:
Prestar atención a los cambios que puedan producir condiciones meteorológicas
adversas, formación de placas de hielo, aludes por acumulación
y metamorfosis, etc… Asimismo, existen unos boletines de información
meteorológica de montaña, en la que se especifican las condiciones
del manto nivoso y el nivel de riesgo de aludes según la escala europea.
Consultaremos en los refugios acerca de la evolución del manto.
• Realizaremos los Tests más completos que podamos de evaluación
de riesgo de aludes.
• Uso del Arva:
Por zonas con riesgo de aludes, debemos conectar los aparatos de rescate de
victimas de avalanchas (ARVA) y llevar pala, sonda y pilas de repuesto. Debemos
practicar los métodos de búsqueda y el uso particular de nuestro
Arva.
• Intentaremos evitar las zonas de riesgo:
valles estrechos, vaguadas, pendientes abiertas, laderas a sotavento. Buscaremos
aristas, lomas y pendientes con anclajes naturales (árboles, rocas).
• Si tenemos que atravesar zonas peligrosas pasaremos de uno en uno, sin
atarnos las correas de esquís o bastones, la mochila cogida de una sola
correa, y un cordino de 10 m atado que nos Servirá para localizarnos
en caso de quedar sepultados. Debemos llevar ropa de abrigo, guantes y un pañuelo
en nariz y boca.
XI. SEGURIDAD EN MONTAÑA: ACTUACIÓN.
• Alertar al grupo rápidamente para intentar
escapar.
• Liberarnos de todo bulto que nos pueda arrastrar al interior, y taparnos
la nariz y boca.
• Si nos arrastra, realizar movimientos natatorios para permanecer en
la superficie..
• Cuando el alud comienza a detenerse, debemos movernos para aumentar
el hueco de aprisionamiento en torno a la cabeza y el pecho.
• Permanecer serenos intentando encontrar la vertical para cavar y emitir
sonidos agudos (mejor un silbato). El 80% de las víctimas de un alud
están vivas al detenerse el mismo.
• Si estamos libres, observaremos el último punto en dónde
desaparecieron las víctimas. Cuando pare el alud, calcularemos la posible
localización de las víctimas, según su trayectoria.
• Avisaremos a los servicios de rescate haciendo una primera evaluación
de localización, víctimas y estado.
o en nariz y boca.
XII. RESCATE EN ALUDES.
• Mantendremos a una persona atenta a otros aludes
mientras nos aproximamos a la zona de búsqueda
• Iniciaremos la búsqueda con la sonda, el arva. Para realizar
el sondeo, nos desplazaremos en fila y separados unos 75 cm unos de otros,
introduciendo la sonda y avanzando a la vez. Una vez determinado el lugar,
cavaremos con la pala lo más rápidamente posible.
Texto: Luis Pantoja
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